Más sobre las mentoplastias

Para nosotros la mejor forma de hacer una mentoplastia es recurriendo  a una osteotomía. Las osteotomías no son más que un corte de la parte inferior de la barbilla,  a la que llegamos a través de la encia, sin cicatrices externas. Una vez ese fragmento de hueso está liberado, lo podemos mover hacia donde deseamos: se puede adelantar, retrasar, alargar, acortar o mover lateralmente. Una vez lo tenemos en la posición deseada, lo fijamos con material de osteosíntesis, similar al que utilizamos cuando operamos fracturas de mandibula. Este material puede ser reabsorbible, es decir se puede deshacer al cabo de unos meses cuando ya ha cumplido su función.

La mentoplastia es una operación sencilla, bien tolerada por los pacientes y que permite visualizar los resultados de forma casi inmediata. En Quiron realizamos este procedimiento bajo anestesia general y en regimen de corta estancia, menos de 24 horas. La recuperación es rápida, y no supone un trastorno laboral para el paciente.